Historia, tecnología e IA en la guerra de Afganistán, 1era parte

Tras los fallecidos en el Aeropuerto de Kabul en enfrentamientos entre tropas de EEUU y los Talibanes y el recuerdo que llega de las escenas de Saigón creo que hablar de sociedad, tecnología y Afganistán es imprescindible en una tragedia que se repite por olvidar la 1era parte

Hoy todos hablamos de la tragedia que supone el regreso de los Talibanes al poder en Afganistán –especialmente para las mujeres y las niñas en un lugar donde su vida no vale nada- pero el conocimiento de la historia vs tecnología militar podría haber evitado esto?(Hilo histórico)
La situación geográfica de Afganistán y su estructura tribal hace imposible comprender este lugar con la definición de Estado a lo largo de la historia y parece no calar en la comprensión estratégica de los estados occidentales que no aprenden jamás.
Desde que fue denominada como Ariana por el asentamiento de tribus “arias” 2000 años antes de Cristo, la disposición geográfica y la organización política que conllevó ha significado el fracaso de cualquier invasión convencional a lo largo de 4000 años. ¿Por qué?
 
Porque invadir Khurasán (así se denominó en el Medioevo) o Afganistán en la Edad Moderna, cuándo hubo un esfuerzo occidental y otros intereses de la zona por unificarla o dominarla bajo la concepción de un estado moderno, nadie comprendía que suponía.
 
Durante miles de años las religiones pasaron en este cruce de civilizaciones donde primero el zoroastrismo y luego el budismo o el hinduismo ligaban a unos pueblos florecientes que comerciaban con las civilizaciones vecinas (Jirof, Tappeh o el valle del Indo)
 
Durante su incorporación al Imperio Persa, Ciro el Grande o Alejandro Magno solo pudo “negociar” con unos pueblos que ya junto a Ciro demostraron su capacidad para la batalla contra los griegos y habilidad para jugar con el terreno
 
Los siglos pasaban y Afganistán, por su situación estratégica no paraba de ser invadida sin éxito por toda clase de pueblos, incluidos turcos y heftalitas (siii, los hunos “blancos”) y ninguna forma de fuerza podía acabar por dominar aquel puzle
 
La complejidad y dureza del terreno, la dificultad siquiera por entender la geografía y como poder afrontarla, así como la facilidad de cada pueblo y tribu por hacer pactos con otros vecinos y extranjeros transformaban aquello en misión imposible ¿Hacía falta tecnología entonces?
 
Pues llego el Medievo y a partir de mediados del 600 los árabes con toda su tecnología militar y organización administrativa no consiguió poner orden en aquel lugar en 600 años más hasta que Gengis Khan a partir del 1200 se dedicó a hacer carnicerías por el lugar
 
¿Y las causas de esas carnicerías? Pues adivinad, los príncipes Afganos matándose y luchando por un poder imposible de conseguir, un territorio complejísimo donde el ejercito de cualquiera podía ser cercado y atacado por cualquier grupo de tribus cabreadas.
 
Incluso con el salvajismo de Mongoles ciertas regiones como Harat no se podían tomar por la fuerza, luego llegó la decadencia de los turcos (Muerte de Aurangzeb 1707) y paso lo de siempre las tribus afganas comenzaron con el ¿Qué hay de lo mío?
 
Pasaron los años y llego la revolución industrial, el imperio zarista y el británico que comenzaron a “meter mano” con eventos tan curiosos como la intervención de la Compañía Británica de las Indias Orientales para someter a un rey aliado de los rusos.

A comienzos del siglo XX Habibullah Khan, intentó sacar al país del aislamiento, ¿Resultado? Guerra con UK por su lucha por la independencia. Ya entonces la conciencia de todos los pueblos de la región era que Afganistán significaba un lugar a donde todos iban a “jugar”.

Resumiendo la 1era parte del siglo XX es un tablero donde UK y Rusia juegan con sus esferas de influencia, mientras que el territorio con la introducción de las ideas occidentales hace crecer nacionalismos y extremismos religiosos, la división es la constante de su historia.

Reino Unido engaña a Habibullah por su neutralidad en la Gran Guerra a cambio de reconocerlo cuando esta acabe –lo que provoca que finalmente sea asesinado- y aumente una vez más el sentimiento de odio y engaño de las diferentes poblaciones Afganas.

Y la cosa sigue y sigue durante todo el siglo XX, no es solo una cuestión de religión (que también) la sociedad y tribus Afganas divididas y reconciliadas durante siglos solo saben que todos los “actores externos” les engañarán y traicionarán, es parte de su pensamiento.

Con el nuevo abandono del poder del ya expresidente Ashraf Ghani y las seguras represalias de un pueblo dejado a su suerte, esta forma de pensamiento se confirma, no importa que una parte de las tribus Afganas odien a los talibanes.

Podríamos pensar que se puede controlar cualquier estado con tecnología y fuerza militar, pero eso es un grave error, solo se puede “invadir”, para poder asentar un orden duradero hace falta estar sobre el terreno y crear estructuras, una cultura y justicia que agrade a todos.

Tras cada invasión, la corrupción, las injusticias, la incapacidad para comprender que ciertas culturas crueles no se combaten con “buenismo” o que la tecnología de la propaganda moderna no sirven en estados rurales se mezcla al final con el mismo resultado: abandono

Afganistán es un lugar de tribus, de cientos de señores de la guerra, de gente pobre que depende del opio, de violaciones de derechos humanos o de promesas incumplidas, frente a eso no existen drones capaces de resolver nada.

Hasta aquí la 1era parte, pero no se puede explicar la incapacidad para combatir a los Talibanes con una máquina de guerra moderna si esto no queda claro primero, porque ellos lo saben y la tecnología militar y la economía o política mundial solo juegan a su favor.
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Ahora dadme unos días para que os aclare el aspecto estratégico-tecnológico mejor, pues imposible desligar historia/cultura/geografía de estrategia militar pero si lo entendéis os resultará más fácil ver porqué pase lo que pase ganan los malos y la tecnología está a su favor.

​Autor y Diseño gráfico: Nerea González - Mani González

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